El Sector de Enseñanza de la Federación de Empleados y Empleadas de los Servicios Públicos (FeSP) de UGT de La Rioja tiene constancia de que en los últimos días el profesorado jubilado de la región está recibiendo llamadas desde la Consejería de Educación para ofrecerles trabajo voluntario: sustituciones, trabajo durante el verano o acompañamientos. UGT denuncia esta situación y apela al sentido común del consejero de Educación.
Es indignante que en este momento de crisis sanitaria, en el que la salud está en juego, se contacte con jubiladas y jubilados, que son población vulnerable y de riesgo por su edad, solo por ahorrarse el coste de las contrataciones de personal, anteponiendo el criterio economicista al sanitario.
Por si esto fuera poco, el consejero Cacho también parece vivir ajeno a la realidad a la que la juventud tiene que hacer frente. Otra de las nefastas consecuencias de la pandemia es la pérdida de empleo generalizada en este sector de la población, ya que muchas y muchos jóvenes han visto truncadas sus esperanzas de trabajo con el aplazamiento de la oferta de empleo público al año 2021. En vez de contribuir a paliar su situación, se le ocurre la brillante idea de contar con el profesorado jubilado.
UGT exige, y así lo ha manifestado en reiteradas ocasiones, que se cuente con el profesorado interino para cualquier actividad docente y que se abran de manera inmediata las convocatorias extraordinarias para nutrir las listas de la mayoría de las especialidades de Secundaria con el fin de abordar con garantías las necesidades educativas del alumnado en La Rioja.
De este modo, FeSP-UGT La Rioja solicita la convocatoria de la Mesa Sectorial de Educación para tratar todos los temas relativos a la contratación del profesorado y a la elaboración de un plan que aborde, con garantías sanitarias, la posible vuelta a lo largo de este mes de mayo a los centros educativos y las condiciones laborales y sanitarias del próximo curso.
