La Federación de Empleadas y Empleados de los Servicios Públicos de UGT (FeSP-UGT) exige al Gobierno de La Rioja que lleve a cabo, de una vez por todas, la reclasificación, del grupo C al A2, de los 17 ayudantes técnicos educativos de minusválidos psíquicos (ATEMPS) que trabajan en el Centro de Atención a Personas con Discapacidad Psíquica Santa Lucía de Fuenmayor. A pesar de que esta reclasificación viene recogida en el Acuerdo-Convenio para los Trabajadores de la Comunidad Autónoma 2008/2011, sigue pendiente de realizarse después de una década.
Tras años de reivindicaciones, este colectivo de trabajadores presentó en 2018 una Proposición No de Ley, que tuvo como consecuencia la convocatoria de una mesa técnica por parte del Gobierno en el mes de noviembre. En dicha mesa, UGT consiguió que se incluyesen las 17 plazas de Educadores de Disminuidos Psíquicos en la Oferta de Empleo Público 2018, requisito legal para poder llevar a cabo la reclasificación.
Tres meses después de la celebración de esta mesa técnica, UGT considera que es hora de convocar una segunda mesa, a lo largo de este mes de febrero, para avanzar en la solución definitiva a la injusticia que sufren estos trabajadores. El deseo del sindicato es que, en esta nueva mesa técnica, se adelante un borrador de convocatoria de promoción interna, para que esta pueda convocarse en el primer cuatrimestre del año.
UGT cree que “ya es hora de solucionar, de una vez por todas, la situación del colectivo ATEMPS, y que no se le vuelva a tomar el pelo, como en el 2015 que, igual que 2019, fue electoral”. El sindicato asegura que permanecerá vigilante: “No permitiremos que sea fuego de artificio electoral y deje de incumplirse la palabra dada”.
ATEMPS
Los ayudantes técnicos educativos de minusválidos psíquicos (ATEMPS) son funcionarios de la Comunidad Autónoma que programan, ejecutan y evalúan las distintas aulas del centro Santa Lucía, como comunicación, taller, lavandería, multisensorial, etc. También se encargan de ayudar y enseñar a los residentes a realizar las actividades básicas de su vida diaria, como el aseo, vestido, comida… y trabajan con ellos las habilidades sociales y comunicativas.
Asimismo, programan, desarrollan y evalúan el ocio y tiempo libre y las actividades acuáticas-recreativas.