El Sector de Sanidad de la Federación de Empleados y Empleadas de los Servicios Públicos (FeSP) de la UGT de La Rioja insta a la Consejería de Salud a que lleve a cabo de la manera más rápida posible las acciones necesarias para que las intervenciones de cataratas vuelvan a ser realizadas por los oftalmólogos de la Sanidad Pública del Hospital San Pedro.
El sindicato ha solicitado una reunión con la consejera de Salud, Sara Alba, con objeto de abordar este tema. En este sentido, UGT ha pedido datos acerca de las intervenciones realizadas en el Hospital San Pedro y en la clínica privada Los Manzanos, así como la lista de espera para esta especialidad en ambos centros.
La falta de intervenciones oftalmológicas en el Hospital está generando otros daños colaterales, como que los médicos residentes no tengan la opción de formarse adecuadamente por el hecho de que casi todas estas actividades se realizan en la sanidad privada, a pesar de la voluntad de los oftalmólogos de efectuarlas en la pública. De esta manera, únicamente se llevan a cabo en el Hospital las intervenciones más complicadas de cataratas que, casualmente, no son derivadas a Los Manzanos.
Este punto es especialmente crítico ya que se corre el peligro de que si el Hospital San Pedro no cumple con unos parámetros de formación adecuados para los residentes de Oftalmología, podría llegar a perder la posibilidad de formar a estos profesionales. En el contexto actual de falta de profesionales médicos, sería una pésima noticia ya que se cerraría la puerta de entrada de estos trabajadores al Servicio Riojano de Salud, dificultando más aún la contratación para el servicio aludido.
Con el cambio de color en el Gobierno de La Rioja, los profesionales vieron una buena oportunidad para resarcir un trato que consideran inapropiado, pero el tiempo pasa y sus condiciones no cambian respecto a la etapa anterior. De nada han servido las reuniones mantenidas tanto con la Gerencia del Hospital, como con la Dirección Médica, salvo para obtener muestras de comprensión y solidaridad que no se han plasmado en mejoras reales.
Ante todo lo expuesto, UGT denuncia el desprecio que sienten los oftalmólogos de la Sanidad Pública hacia su trabajo por parte de la Administración, además de la imposibilidad de llevarlo a cabo adecuadamente.