El Comité de Empresa Transportes Sanitarios de La Rioja UTE – Ferrovial recuerda que en diciembre del 2016 la Consejería de Salud adjudicó el concurso de transporte sanitario en La Rioja a Ferrovial, con una rebaja importante de un millón de euros al año y con grandes problemas dotacionales.
Las consecuencias de esta rebaja la sufren tanto los trabajadores, con precariedad laboral y salarial, como toda la sociedad riojana, con un servicio deteriorado y con carencias. Así, el Comité desconoce cuáles son las mejoras que Ferrovial ofertó y por las que superó al resto de empresas, pero asegura que dicha oferta no puede ir por debajo del pliego, que ni siquiera se cumple.
Desde la Consejería de Salud se apresuraron a tranquilizar a los trabajadores, prometiendo que la nueva empresa iba a ser mejor y que iban a respetar todos sus derechos e incluso a mejorarlos. La situación real, en cambio, nada tiene que ver con las promesas realizadas por la consejera María Martín.
Muchas de las ambulancias contratadas no están operativas ni en los días ni en las horas fijadas por el pliego, no se cubren las vacaciones ni los permisos, y los vehículos quedan parados, lo que significa una mayor demora, sobrecarga de trabajo y peor calidad del servicio.
Además, se están realizando servicios privados con vehículos de la Consejería de Salud, cuando los pliegos de prescripciones técnicas del concurso de adjudicación del transporte sanitario recogen que las empresas concesionarias no pueden realizar traslados privados con recursos incluidos en el concurso, y que su realización constituye una falta muy grave.
Por otro lado, los trabajadores han sufrido un empeoramiento sustancial de sus condiciones laborales, movilidad geográfica y de turnos, eliminación de dietas, horas de comida no remuneradas, sobrecarga de trabajo, precariedad laboral… Además de haber asumido una importante pérdida de poder adquisitivo y un elevado nivel de ansiedad.
El Comité también denuncia que existe un abuso de los contratos en prácticas, que no deberían ser utilizados para cubrir puestos estructurales, según numerosas sentencias. Así, Ferrovial va cambiando la plantilla en base a este tipo de contratos, aplicándolos a todos los trabajadores que no son fijos, incluso a algunos que cuentan con ocho años de experiencia. Estos hechos, al igual que otros tantos, ya están denunciados en Inspección de Trabajo.
La Consejería es conocedora de dichas irregularidades, ha mentido descaradamente y hace caso omiso a la situación tanto de los trabajadores como de los usuarios del servicio, olvidándose de su deber de vigilar el cumplimiento del contrato, permitiendo que Ferrovial lo incumpla sistemáticamente.
De este modo, el Comité quiere trasladar a la Consejería que el pliego es insuficiente, que Ferrovial no tiene respeto ni por los riojanos, ni por los trabajadores, y que todas las irregularidades que se están cometiendo se deben a la necesidad de hacer rentable la temeraria bajada en la oferta de Ferrovial, para asegurar la adjudicación. Por ello, el Comité exige a la Consejería que obligue a la empresa a cumplir con cada una de las condiciones contratadas, y que sancione a la adjudicataria por todos y cada uno de los incumplimientos, rescindiendo el contrato si fuera necesario.
Los profesionales del transporte sanitario piden diálogo, tanto con la empresa como con la Consejería, para poner solución a las graves deficiencias de funcionamiento y de organización, y para establecer unas condiciones laborales y salariales dignas.
De persistir esta situación, el Comité no descarta ningún tipo de acción en defensa de los derechos de los trabajadores y de todos los riojanos de disponer de un servicio de transporte sanitario de calidad.