UGT y CCOO han instado a la patronal del sector a negociar el III Convenio de Residencias de La Rioja, que lleva sin renovarse desde el año 2010. Así, los trabajadores de este sector tienen el salario congelado desde el 2015 y, hasta entonces, habían tenido subidas salariales que apenas alcanzaron el 3,5%. Mientras, el IPC ha subido un 10,3%, lo que supone una pérdida anual de poder adquisitivo cercana al 1% cada año, en un sector ya de por sí de extrema precariedad laboral.
A pesar de los intentos por llegar a un acuerdo en negociaciones anteriores en los años 2011, 2012, 2014, 2015 y 2017, la postura de la patronal no ha cambiado en cuanto a su intento de aplicar aumentos insignificantes de salarios, nula rebaja de horas de trabajo y cero mejoras en materia de derechos sociales. Así mismo, para que cumplieran lo pactado en el actual Convenio y aplicasen las subidas del 1% en los años 2012 y 2013, CCOO y UGT tuvieron que acudir al juzgado, que les dio la razón, tanto de esos dos años como de los dos siguientes, siendo la subida de un 0,25% en estos dos últimos años.
Desde UGT y CCOO pedimos a la patronal que se esfuerce más de lo que lo ha hecho hasta la fecha. Es urgente mejorar la situación de los empleados de este sector, cuyas cargas de trabajo son cada vez mayores y sus condiciones cada vez más precarias. Además, los precios de las plazas públicas han subido más que los salarios desde el 2010 hasta el 2017, y las plazas privadas también han aumentado considerablemente en los últimos años.
Sirva como ejemplo, en el año 2014 las plazas privadas riojanas ya se situaban a precio similar al de Guipúzcoa y lejos del de comunidades como la Valenciana: 2003€ al mes en La Rioja, 2085€ en Guipúzcoa y 1637€ en Valencia, de media. Hay que precisar que los salarios base difieren mucho entre unas provincias y otras, siendo el salario base bruto de personal Auxiliar/Gerocultor en La Rioja de 959€, en Comunidad Valenciana de 961€ y en Guipúzcoa de 1425€. Es decir, en La Rioja, cobrando la plaza a un precio similar al de Guipúzcoa, se están pagando salarios como los de Comunidad Valenciana.
Por todo esto, desde CCOO y UGT apostamos por una negociación colectiva que garantice un empleo de calidad, que reconozca a los profesionales del sector la responsabilidad y el esfuerzo que realizan con un adecuación salarial más justa, que asegure la calidad de los servicios, que permita una conciliación familiar y laboral sin limitaciones, que invierta más en prevención y protección de la salud laboral, que impulse el asentamiento de las plantillas, que se establezcan ratios adecuados de atención de pacientes por profesional y que se mejore la valoración de las personas a través de la Ley de la Dependencia.
