Mañana, 6 de septiembre, inicia su andadura el curso escolar 2019-2020 con la llegada a las aulas del alumnado de Educación Infantil y Primaria, a los que seguirán los del resto de los niveles educativos en los próximos días. Será, a juicio de UGT, un “curso atípico”, puesto que ha sido diseñado y planificado por los responsables políticos del Partido Popular y deberá ser gestionado por el Partido Socialista.
Para el sindicato, “este nuevo curso supone una oportunidad única para desarrollar unas políticas que permitan rectificar los recortes y errores cometidos en el ámbito educativo público durante los años de la crisis económica que, para la enseñanza riojana, todavía persiste”.
UGT desea que el diálogo y la participación que el consejero de Educación, Luis Cacho, ha ofrecido a la comunidad educativa se hagan realidad, porque son muchos los asuntos pendientes de resolver, relativos tanto a las condiciones laborales del profesorado como a otros aspectos fundamentales que figuran en el acuerdo programático que el PSOE ha firmado con IU y Podemos: incremento del presupuesto para educación, nueva zonificación escolar, prevención del absentismo y fracaso escolar, reducción de ratios, sustitución inmediata de bajas y permisos, revisión de la orden de bilingüismo, escuela rural…
UGT considera que el profesorado, como motor de la educación, necesita la implementación de medidas que contribuyan a su motivación y al reconocimiento de su labor. Es por ello que el sindicato demanda medidas como el aumento de plantilla, reducción de la tasa de interinidad para crear empleo estable, reconocimiento de las tutorías, carrera profesional, puestos de difícil desempeño o la recuperación del cobro del verano para los interinos, entre otras.